El pasado viernes se produjo un ciberataque mundial que afectó a distintas organizaciones en casi cien países. Es la primera vez que se produce un ataque informático de esta magnitud a nivel mundial.

El WannaCry encripta la información de los ordenadores afectados y los hackers piden una compensación económica para poder recuperar esa información. Exigen que la compensación se pague en bitcoins (moneda digital) para que resulte más complicado rastrear los pagos.

Al conocer la información de que se había producido un ataque, Marcus Hutchins, un joven de 22 años que vive con sus padres en la región de Devon(en el suroeste de Inglaterra), y que trabaja en una empresa de ciberseguridad, pero que en ese momento estaba de vacaciones, decidió ponerse manos a la obra y estudiar el caso desde el dormitorio de su casa.

Después de varias horas de investigación descubrió, tras infectar su propio ordenador, que cada vez que se infectaba un ordenador, el virus trataba de conectar con una dirección web que no estaba registrada. Por eso, Hutchins verificó que el dominio estaba libre y decidió registrar ese dominio para lo que abonó 10,69 dólares.

Hutchins, que hasta el viernes pasado era un completo desconocido se convirtió en un héroe al lograr frenar la expansion del virus. La utilidad del método de Marcus fue comprobada por numerosos expertos y el joven inglés está recibiendo numerosas ofertas de trabajo gracias a sus habilidades informáticas.

Aun después de la hazaña de Marcus, los expertos siguen advirtiendo que la amenaza continúa y podrían producirse más ataques en los próximos días.

Andrea

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